30.09.2016
Pues si, Zapatero tenía razón…
¿Recuerdan a principio del año 2009 cuando, al principio de su segunda legislatura, el gobierno del Presidente Rodríguez Zapatero, liderado en la economía por la ministra Salgado, esgrimió el mantra del cambio del modelo productivo como el eje del desarrollo de la economía y de la salida de la crisis?
Aunque tarde, fue uno de los pocos momentos de visión económica a lar- go plazo que tuvo ese Gobierno. Véase sino el siguiente gráfico del servicio de estudios del BBVA en el que se puede ver como en los 8 años anteriores a esas declaraciones, los de la gran juerga, la economía española creció con mucha fuerza, pero con una mejora prácticamente nula de la productividad. Solo a base de acumular recursos humanos y de inversión.
Desgraciadamente, al “too late”, se le unió el “too little”. Dos años después el parlamento español aprobaba la ley de la economía sostenible. Dicha ley ya llevaba parte de la penitencia en el titulo (fíjense que pasábamos de productividad a sostenibilidad. Y las dos están bien, pero ustedes entienden el matiz).
Sin embargo, lo mas grave del “too little” era la falta de contenido de la ley. Tanto, que lo mas debatido de la norma fue una de las disposiciones finales que dio lugar a la llamada “Ley Sinde” que regulaba las descargas de internet. Ya entenderán que si lo que generó debate fue esto, tampoco había mucho cambio en el status quo económico.
Y cambiar, lo que se dice cambiar, sigue siendo necesario. Y eso que algunos aspectos importantes como la competitividad salarial y, especialmente, el sector exportador han mejorado mucho, pero no lo suficiente. En el siguiente gráfico pueden ver la comparación de la productividad por hora trabajada de nuestra economáa y las de su entorno. Lo hace midiendo el VAB (valor añadido bruto) por hora, es decir, el incremento de valor que se genera en cada hora trabajada, el mismo concepto por el que se genera IVA. Evidentemente, a mayor VAB por hora trabajada, mayor productividad de la economía.
Hombre, vamos en mejor camino que Portugal o Italia pero estamos claramente en el pelotón de los torpes. ¿Qué que hace falta para arreglarlo?. Pues un parlamento dispuesto a llegar a acuerdos que supongan cambios estructurales en pos de un modelo productivo basado en la competitividad de las empresas, la sostenibilidad de sus modelos productivos y del reparto justo del valor añadido creado.
Sé que estas tres últimas cosas son muy difíciles de conseguir y que los partidos difícilmente se pondrán de acuerdo en los comos. ¿Pero un parlamento dispuesto a trabajar?, debería ser mas fácil y casi llevamos un año.